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ALEPO, SIRIA ANTES DE LA GUERRA

Llegamos en avión desde Madrid como a las 2am a Alepo. Teníamos sólo reservado la primera noche en la ciudad, todo lo demás lo haríamos sobre la marcha.
Desde España habíamos intentado reservar la noche en el Spring flower hostel, pero como llegábamos tan tarde nos dijeron que no se comprometían a guardarnos la noche, así que reservamos en otro hostel que estaba justo enfrente.


Ciudadela de Aleppo en Siria

Aunque en este hostel que reservamos les habíamos dicho que llegaríamos tarde, nos prometieron guardarnos la habitación, pero cuando llegamos en taxi desde el aeropuerto a las 2am, nos dicen que ya la habían alquilado..

En medio de la noche,  no pude por menos que cabrearme con el responsable y le aseguré que si no encontraba otro hostel, que me tirase un colchón en el suelo y que dormiríamos ahí,  a lo que me contestó que sí, y además,  nos llevó al Spring flower hostel, que estaba justo enfrente, despertó a su recepcionista y éste con un sueño profundo, agarro unas llaves, nos llevó hasta una habitación y nos hizo señas de dormir y mañana hablamos…así que el final terminamos durmiendo en el Spring flower hostel, el hostel que queríamos desde el principio.

Antes de llegar a la ciudad, mis expectativas sobre ella eran altas y se cumplieron con creces.
La ciudad antigua de Alepo fue declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco. Dentro de la declaración, además del centro histórico, rodeado por una muralla con siete puertas, están incluidos otros barrios antiguos y otros monumentos más alejados del centro histórico.

Vista de Aleppo desde la Ciudadela

Alepo es una ciudad muy especial, la más especial de las que visitamos de toda Siria. Una de las cosas que le hace ser así de especial, es la autenticidad y el aferro radical musulmán que se palpa en el ambiente y que se hace visible con el burka que llevan muchas de las mujeres. La mayoría de ellas van todas tapadas de negro e incluso todo el rostro o llevan una redecilla negra en los ojos, aparte de guantes negros en las manos. Nunca había visto en persona una vestidura musulmana tan radical. Yo intentaba no mirarlas mucho, pero había siempre cruces de mirada… ¿Qué pensaran de mí?.

Lo primero que visitamos en la ciudad fue su ciudadela, construida en el Siglo XVIII que asoma sobre un cerro a la ciudad actual. Tiene las  laderas de su colina recubiertas por un foso (hoy seco).
El castillo de Alepo que está situado en una orilla de la misma ciudadela, cautiva a los paseantes por sus dimensiones y sus características. Es uno de los símbolos de la ciudad y es lo que más llama la atención de todo el complejo. Antes de subir a la ciudadela nos hicimos un montón de fotos con el castillo que salen mejor desde el exterior de la ciudadela que desde el interior de ella.

El acceso a la ciudadela se realiza a través del castillo que tiene un notable bastión de entrada, pasado el cual se llega a una serie de callejas empedradas y escaleras que conducen hasta los diferentes edificios y estancias de la ciudadela.
La antigua ciudadela consta de ruinas de mezquitas, antiguos baños, hammam, palacios… todo merece su atención, en particular la suntuosa ornamentación de la sala del trono.

Castillo de Aleppo en Siria

Ciudadela de Aleppo en Siria


La ciudadela puede llevar varias horas recorrerla entera. Nosotros la recorrimos tranquilos sin apenas compañía y estuvimos toda una mañana. Las vistas de la ciudad desde allí arriba son buenísimas. Me ponía a contar el número de minaretes que se ven en la ciudad desde sus miradores y era como contar estrellas en la noche...

Despues de la ciudadela fuimos al zoco, muy cerquita el uno del otro. Los zocos de Alepo están considerados los más activos de Oriente Próximo. Son techados y tienen hasta doce kilómetros de galerías oscuras donde se suceden millares de puestos agrupados por gremios y en los que se vende una gran variedad de productos artesanos e industriales. Entre comerciantes, la ayuda mutua puede más que la competencia.
Aunque parece mentira decirlo en el zoco de Alepo se puede pasear sin agobios, es un zoco bonito y cuidado para atraer a los pocos turistas que aparecen por allí.

Zoco de Aleppo Siria

Paseamos por el casco antiguo de la ciudad de Alepo que es el típico casco antiguo de estilo árabe con callejas donde aún se conservan los restos de lo que eran las murallas y alguna puerta de la antigua ciudad. Callejear por sus callejuelas es una bonita experiencia. Los turistas son víctimas de todas las miradas de los lugareños.

La mayoría de las miradas en la ciudad se la lleva la Gran Mezquita edificada en 715 por el Califa AL Walid  y reconstruida tiempo después. Es  un edificio de tres naves con un minarete de cinco pisos de altura
Alrededor tiene un gran patio de baldosas policromas. En el patio de la mezquita pasamos mucho tiempo paseando y haciendo fotos, por allí merodeaban unos niños que nos perseguían y que querían que les sacásemos fotos para verse después.
Andar descalza por el patio  de la mezquita resultaba atrevido porque se me quemaban los pies.

Pese a ser la Gran Mezquita de la ciudad de Alepo no resultó ser de las mezquitas que más me atrajeron del viaje. En el centro de la ciudad hay otras mezquitas que también son interesantes como la mezquita Al Adiliye o Al Bahramiye. La mezquita Al-Adiliyé esta construida en el más puro estilo otomano y para mi gusto más bonita y genuina que la Gran Mezquita.

Gran mezquita de Aleppo Siria

Portada mezquita en Aleppo Siria

Me gustó más otra mezquita que visitamos en la ciudad,  que era más moderna y tenía una arquitectura más árabe. La estructura de mezquita árabe consiste en una gran cúpula central y pequeñas cúpulas en los lados con los minaretes en las esquinas, como las mezquitas que aparecen en los cuentos de "Las mil y una noches". En concreto ademas esta mezquita tenia las cúpulas decoradas de color verde. Me gustan las mezquitas con esa estructura porque son más desconocidas para mí y esta era la primera vez que las veía en persona.

Mezquita de las mil y una noches en Aleppo Siria

Barrio cristiano de Aleppo

Aunque parezca mentira la ciudad de Aleppo, pese a que es cuna del islamismo radical, existe un asentamiento importante de fieles cristianos. Paseamos por el barrio cristiano y visitamos varias iglesias católicas, entre ellas destaca la catedral. Se me hace muy raro ver presencia cristiana en un país de mayoría musulmana.
Desde Aleppo viajamos en autobús a la ciudad de Hama 

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